NÚMERO 15 SEPTIEMBRE 2017

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AÑO III - NÚMERO 15 - SEPTIEMBRE DE 2017 - DIRECTOR FUNDADOR: MARIO BERMÚDEZ (COLOMBIA) -  EDITORES MÉXICO: ABRAHAM MÉNDEZ - CARLOS AYALA

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PÁGINA 21

MARINA MATTARUCCO  -ARGENTINA-

 

Marina, como su nombre lo indica viene del mar. Aterrizó en la Ciudad costera de Necochea, en la ciudad del tango, Buenos Aires, Argentina, un 27 de febrero de no sé que año, porque fue hace como diez años. Es su cuarta resurrección en esta vida, ya que tiene el don de nacer y morir repetidas veces. Sensible a la música y apasionada del arte, le gusta escribir, cantar y actuar. Inquieta, curiosa, versátil, ciclotímica, cuestionadora, rebelde y demás no cualidades que la llevan danzando por el mundo, he aquí escribiendo estos versos que comparte ahora con alguna pequeña gran porción del mundo.

 

1- Rueda del karma

 

rueda de hámster.

Rueda y rueda.

Círculos.

Planetas.

Lunas.

Perlas.

Ayer, hoy y mañana,

el tiempo no pasa.

Detenido.

Mil vidas en este instante.

 

2- ATRAVIÉSAME

 

Atraviésame con un rayo de esperanza,

dime que el camino no termina en un barranco.

Atraviésame el alma con tus sueños,

y dime que me amas, más allá de los tiempos.

Dame todo y más,

paz en mi corazón.

Guía este desborde de pasión,

amor que conduce a la locura,

a ese lugar donde sólo un dibujo puede entrar,

y sólo con sus propias alas, volar, amar.

 

3- En la infinita inquietud

 

y torbellino de los días

que se suceden,

hoy siento paz

que se hace carne.

La mente se detiene.

La angustia de un retorno

regresa cual fantasma.

Respiro.

Intento ver más allá de este cemento gris

que me rodea,

y siempre regresa la misma imagen:

el agua cristalina y los delfines.

 

4- HIPNÓSIS

Cuanto más te miro,

más me fascino.

Ojos rojos de adicción,

manía loca que me embriaga la vista.

Sigo, continúo y no paro.

Me gusta

y quiero más.

Más pupilas, más corneas, más humor vítreo.

Más pestañas que visten a tu alma.

Te observo y te miro,

y me pregunto: ¿que tienes de distinto?

Todo.

Eres especial, diferente

Tu sonrisa, tu boca,

y sobre todo tus ojos.

Sí, sobre todo tus ojos

tan raros, tan tuyos,

tan pupilas, tan corneas, tan humor vítreo.

Es mirarte el alma

con mi alma.

 

 

5- TRANSMUTACIÓN

 

Ese dragón de fuego,

que incineró al miedo,

en aquella batalla cruenta,

llena de llanto y lamentos.

Llena de baches, avenidas vacías,

y carteles de hasta luego.

Postergaciones y desesperanzas,

zona de frío, más frío que el hielo,

alejado del templo.

Y voló con sus alas cuadrúpedas,

cargando esas grandes patas de lagarto herido.

Cerrando su boca,

sus llamas hacia adentro,

cauterizando los cortes sangrantes,

abiertos por inocencia

de niña dormida.

Atiborrada de sangre y con olor a rancio,

selló lo inconmensurable.

El dragón del miedo es ángel de nuevo

por obra de su fuego.

No eran tus cuerdas vocales emitiendo sonidos.

Era tu aroma,

y la música de tu tic tac, tan,

tan peculiar.

Tic tac, tan tan, te vi.

Me asomé, y tus ojos cautivaron mi ser.

Ven acércate, dijiste,

te estaba esperando,

déjame contarte con este beso

lo que vivimos juntos.

 

6- DÍAS

 

Hoy es un día raro,

el amor es raro,

y cuanto más raro, más me gusta.

Hoy es un día mágico,

el amor es mágico,

y cuanto más mágico, más me gusta.

Hoy es un día bello,

el amor es bello,

y cuanto más bello, ¡más me gusta!

 

7- PARTITURA

 

Préstame una nota

que quiero terminar la sinfonía,

en esta agonía de lentas mordidas.

Dame un sonido grave o un agudo,

que me penetre extasiada

de placeres insomnes,

vacío que cala en mi existencia,

música torturante de tu alma,

como castigo a la distancia.

Dame esa nota, te lo ruego,

hazme volar en tus cuerdas,

que me falta la última sola,

para cantar tu sintonía

y adorarte,

entre mordidas y besos,

quiero terminar tu sinfonía.

 

8- PIRATA

 

Ven...

Apaga este fuego incandescente

con tu irresistible aliento

que enamora,

que me embriaga con tu océano bucal,

con tu lengua perturbada y ansiosa,

con tus brazos, brisas que me envuelven,

me enroscan,

me oprimen dentro tuyo...

Traspásame con tu piel

Y deja que nuestra sangre se mezcle

Toma todo de mí

y déjame ser tú,

como lo fuimos siempre.

Conexión divina,

velas al viento.

Se tú mi timonel.

Arráncame las ganas que tengo hoy de zarpar

a ese lugar donde sólo nosotros, y no es sueño,

podemos estar despiertos sin dormirnos

donde podemos permitirnos ser Mar, ser hombre, ser mujer... ser un ser.

Un ser que ama más allá de tormentas marinas

más allá de realidades

más allá de sexos y conspiraciones

¡Cuánto anhelo siento!, ¡cuántas ansias!

Mi Pirata de nieve que derrite el fuego de mis labios

en ese beso eterno que aún no te he dado.