MARTÍN ALARCÓN NOVOA -MÉXICO-

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(Mart Alar)
Martín Alarcón Novoa
Michoacán, México.
Director general de diplomados de las artes, Autor de libros de poesía y pedagogía en artes.
Correo: aladanzamar04@hotmail.com
 

 

NOCHE JUSTA
 
Me gusta la llegada de la noche plena,
apresuro el día para que llegue a manos llenas,
que llegue desnuda y sin reprimenda,
acompañados de la luna crecida.
 
Que me acuse el poseerte,
y me aprese hasta el delirio,
abriendo paso y conocerte,
abierta la ventana que asalte sin martirio.
 
La mesa quede presta,
degustamos del presente,
hagamos de esta noche una cortejo,
no hay prisas, detente.
 
Soy creyente de la noche,
me arrodillo ante el contexto,
no existen reglas a madia noche,
para amarte sin pretexto.
 
Para efectos del amor,
ningún sedante como la noche,
agreguemos una pizca de calor,
entre más pecado mas derroche.
Ninguna frase está en espera,
solo el roce de tus labios,
y que el mundo quede fuera,
no se admiten los agravios.
 
Esplendorosa y dominante,
solo dos en el banquete,
lo declaro profundamente,
todo viene en el paquete.
 
Un farol en el ocaso,
mi pasión sale por mi boca,
desbordado por si acaso,
que duela debajo de m boca.
 
Sin fantasías todo se vuelve más complejo,
átame a tus cabellos,
de tal manera permanecer perplejo,
y de ellos embelesarme con tus bellos ojos.
 
En la guerra de la noche todo se ajusta,
cada implemento se traduce en placer,
cada momento el amor se incrusta,
pasados los años me produce quehacer.
 
Retornar al mismo recoveco diurno,
donde me hechizan los recuerdos,
consumiéndose ahí uno a uno,
culminando de vez en cuando cuerdos.
 
Puedo escucharte lenta y discreta,
dueña de mi cuerpo inerte,
reposando desnuda e intacta,
en la intimidad enmudecida el poseerte.
 
La noche no promete nada,
ábreme la sabana vientre obscuro,
más espero de ti mi bien amada,
y descifremos juntos el futuro.
 
Desciende por la calle estrecha,
formas asimétricas sobre el cristal,
no confundas la brecha,
quédate quieta bajo el umbral.
 
Adicto al manto de la noche,
Inventemos nuevos deseos por estar contiguos.
 
Cuando la noche nos reúna se consumirá la batalla,
llegará el blanco día,
de un rio interminable,
limpio de polvo y melancolía.
Arte estético,
un poema es una noche,
una noche es un poema,
el pecado se anula,
aquí todo es normal.

 

*    *    *

 
 
AL FINAL
 
Y cuando todo termine,
en el momento incierto de la muerte,
dejaré impreso mis sueños,
y me iré con todos los recuerdos.

 

 

*    *     *

 
 
INMORTAL
 
Prefiero una caricia,
esas que van sin rumbo,
las que enmudece el índice,
y paraliza el corazón.
 
Las que proponen,
las que estrujan y embrujan,
y que al final imponen.
 
Oh, luz de luna,
entonces mi cuerpo será fiel a tus manos,
oh, temblorosa piel,
una caricia nunca llega tarde,
licor del cuerpo que une y sacia.
 
Mi pecho arde por el embeleso aproximado,
espacio donde gravita mi respirar,
hoguera donde expira el calor,
mi cuerpo busca tenderse al tuyo.
 
Seré inmortal si llegas a mí,
si te allanas en mí,
si te ahogas en mí,
si amaneces en mí,
sobre ese cuerpo convulso y rompible.
 
Oh, amada y amante mía,
luz y sombra de mi espejo,
mi cuerpo espera alma mía,
en la última gota de sudor deseoso.
 
Del rio donde beben las estrellas,
de la niebla que se esfuma,
y la miel disuelta del paraíso,
campo donde emana la dulzura.
 
Oh, licor que descuella en recuerdos,
besos de fuego sobre el rojo carmesí de tus labios,
fecundado en simetría hacia el cielo profundo,
coronando en tus ojos de florones y luceros.
 
Rendida queda la noche,
contiguo al ahogo embebido de efusión,
prefiero esa caricia inoportuna,
en la intimidad profunda de la luna.