ANABY MARTÍNEZ ARRECÍS -GUATEMALA-

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PÁGINA 28

 

 

Nació en la Ciudad de Guatemala el 03 de junio de 1995. Cuenta con Profesorado en Lengua y Literatura extendido por la Facultad de Humanidades de la Universidad de San Carlos, donde también continúa estudios superiores en Licenciatura en Letras. Actualmente labora en dos establecimientos educativos de su municipio, trabajando nivel primario y medio en la enseñanza del Idioma Inglés y con nivel medio la enseñanza de Lengua y Literatura. Escribe por menester, inicia la pasión por los versos en 2015, mientras estuvo a cargo de la conducción de actividades alusivas a la conmemoración de independencia del país dentro de uno de los establecimientos donde hasta la fecha aún labora; su inspiración en aquel entonces fue, construir panoramas de lugares de Guatemala y algunos rasgos culturales.  Tanto su poesía como narrativa aparecen publicadas hasta 2021 en las antologías poéticas El vals de los poetas y 25 poemas guatemaltecos del proyecto Quetzal poético, asimismo dentro de la antología poética Renacer en Primavera por Ediciones Afrodita de Córdoba Argentina; la misma se encuentra de forma digital y en físico a la venta, antología Guatemala: Antología Literaria Contemporánea por Escritoras Guatemaltecas, Kametsa Editorial, Revista La Literatura no es para Zalameros Vol. II de Editorial Factótum, Laprefe Magazine en sus ediciones Ni muertos ni más fuertes y Navisad 2.0 y recientemente en la edición número 6 de la Revista Luna versos de plata “Homenaje a Augusto Monterroso”.
Redes sociales:
Facebook: Anaby Martínez Arrecís
Instagram: @any_tabora
 

 

Quizá en otra vida


Quizá en otra vida
pueda entibiar tus carnes,
quizá en otra vida
nuestras almas se estremezcan
en un solo vaivén,
quizá en otra vida
mi cabello reseco descansará sobre tu regazo,
quizá en otra vida
beberé la dulzura de tus labios rojos,
quizá en otra vida,
desvestirás ese cuerpo de niña dócil,
y bautizarás con tu esperma,
sudor de varonil espíritu,
quizá en otra vida,
arrojes tu dulce boca a este voraz río,
cauce de aguas dulces, de vez en cuando, saladas;
quizá en otra vida,
te encuentre sentado al fondo de ese salón,
quieto, rendido a las exigencias de este mundo
lleno de mierdas,
silencio que te ahoga,
candil de mi perezosa y ridícula figura;
quizá en otra vida,
el destino nos choque,
haciendo el ridículo,
en una tarde de verano,
quizá en un feroz invierno,
quizá en otra vida,
lograré permanecer en tu premura,
como un ave cautiva,
en un mundo lejos de golondrinas.


 

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Y ya estoy harta…


Estoy harta,
¡Sí! harta,
de ser la nada entre el todo,
de siempre gritar en silencio,
de trazarle letras al aire,
de agrandar las corrientes de los ríos,
con lágrimas que se llevan mis ganas de seguir.
¡No puedo!, de verdad
¡No puedo!
Me canso de hacer todo por nada,
tanta forma de clavarme en tus ojos,
como niña traviesa emblandecer tu alma,
para que me veas, me escuches,
me sientas y me recuerdes;
porqué, en este paraíso infinito,
también existe una férrea voz,
ardiente mirada,
manos endulzantes,
sonrisa embriagante,
sutil flor;
guardado en cuerpo de mujer,
tatuado con el nombre de: A. M.

 

 

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Si tus palabras se las lleva el viento…


Si tus palabras se las lleva el viento,
deja que vayan por los montes del Altiplano
y rieguen los campos secos por la canícula,
ya vez que le hace falta ver a la niña,
el árbol regocijante de manzanas rojas.
Ve y deja que disuelvan las ansías del mentiroso,
la sed y hambre del mendigo,
la llama atemorizante de aquella madre,
que ve salir con rumbo infinito, a su hijo. 
Van a llegar a las gotas de lluvia,
y créeme que las va a endulzar,
van a penetrarse como fantasmas en tu jardín,
en días sabrosas piñas y fresas van a brotar
van a posarse al ras del arcoíris,
para emerger la noble sonrisa de aquella joven perdida.
Pero si esto no te convence,
llegarán a mi abriendo mis labios,
bajando por mi garganta,
y se escurrirán por mi blanco corazón,
y solo así habrás cumplido tu objetivo,
el que nadie parecía escuchar,
pero el mundo sabía de más,
y es que, dentro de mí,
luz, fuego y carne
al fin reposaran por la eternidad.