MARIO BERMÚDEZ -COLOMBIA-

Soy eterno aprendiz de escritor y poeta, de rancia estirpe rola, nacido a mediados del siglo XX en la fría Bogotá, Colombia, en donde puedo compartir esa simbiosis producto de las épocas parroquiales, el mundo en transición con el abrumador modernismo de la computación y la informática. Desde casi niño incursioné en el mundo en las letras, más como un hábito imperioso, fatigante e ingrato, cosas que también lo pueden hacer a uno feliz. He escrito algunas novelas, muchos relatos, y en los momentos de la súbita inspiración, ya en el recuerdo, ya en la pasión y ya en la imaginación, algo poesía.


Por autoedición, destaco mis títulos: El Mito Humano, una visión psicosocial de la historia de las religiones ariosemíticas. Suicidio al atardecer, Breve historia de la guerra de los Mil días en Colombia, La huella perpetua, entre otros. En poesía suelo utilizar títulos tan insólitos con palabras de un mal invento, como Tríptico Pléctrico, Pristinaciones Numénicas y Pentagrafía Estróica. Seguimos en la briega de la pluma hasta que el camino termine.

 

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Desde marzo de 2015 comencé la ilusión de hacer felices a los autores de las redes al publicarles sus sueños literarios, sin más retribución que, algunas veces, el agradecimiento o el mudo silencio de que se cumplió con un propósito con seres ajenos cuyo único objetivo de distante unión es la literatura. Con este objetivo creé la Revista Literaria Trinando.

 

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PÁGINA 20

 

DE NOCTAMBULISMOS E IRREVERENCIAS

Poemario enero de 2021 

 

 

El amor me llenó
de odios y pasiones
de jolgorios y plegarias
incapaces de romper corazones


 
POST MORTEM


Volvieron a sonar las campanas en lontananza
augurios frugales de una vida postrera
que rauda y ruda sin misericordia avanza
allá en la lejanía y bajo la cúpula debe estar el cura
después de que el tiempo sin apremio
ha roto sin remedio esta anhelada esperanza
que la vida de estos últimos tiempos nos hizo amarga y dura
 
Se llenaron de rosas rojas las calles
e invadieron la noche en una balacera policial
que segó la vida de los transeúntes
cayeron los pétalos de las rosas entre charcos de sangre
de una noche violenta y fantasmal
y todos se hicieron mudos ante la masacre
mientras las cámaras furtivas registraron el dolor
de las madres que lloraron a sus hijos muertos
de los padres que se acongojaron por las hijas
que sin retorno alguno se fueron para siempre
entre nubes endrinas que infestaron las sombras y la noche
el fuego se hizo sin compasión escondido vengador
 
Rodaron las lágrimas convertidas en gotas de cristal
y el llanto candente inundó los corazones
en raudales de tristeza que voló al infinito
y el silencio subió incólume a las altas esferas
de un mundo sin dimensiones bañado de oprobio
los muertos silentes a sus tumbas fueron
los vivos perplejos al martirio rodando por las laderas
los tronos revindicados con el cetro de la tiranía
coronados por la miseria que balas dispara el poder
de gente compungida que no encuentra soberanía

 

 

*     *      *

OPROBIANDO


Me dejaste en el atardecer
extrañaré tus besos y tus caricias
la tarde cruzó rauda
invadida por el silencio de tu partida
y fui al manantial a beber tu olvido
crucé por el jardín del abandono
tratando de rescatar una flor marchita
pero tú ya no estás
simplemente sin consideración te vas
llega la noche cubierta con estrellas
abrigadas de insomnes desvelos
llega el frío constelar de tu ausencia
y en mi abandono de infinita desolación
ni tus caricias ni tus besos rescato
surcan mi corazón mil candentes espadas
cae tenue el recuerdo de tus ojos
y de tu boca roja que amplia me besaba
pasó el día
pasó la tarde
y llegó la noche de tu olvido
tu maravilloso cuerpo traspasará los muros
de mi febril imaginación
y el tallo erecto de la flor muerta
vibrará al unísono
al añorar lo que tuve entre mis manos
pero díscolo es el amor
y díscola la pasión
sentimientos primitivos sin algún pudor
solo sé que te fuiste en silencio
y las mudas palabras tristes se escindieron
en el jardín del abandono
no quiero ver más las flores muertas
que alguna vez fueron bellas
no quiero sentir más el corazón quebrado
que alguna vez fue sangrante de estrellas


 

*     *     *


HAY NOCHES


Hay noches
noches frágiles
noches eternas
hay noches
noches sucintas
noches de desvelo
hay noches
noches de miedo
noches de soledad
hay noches
noches de besos
noches de concúbitos
hay noches
noches encubridoras
noches díscolas
de díscolas caricias
hay noches
noches en que te olvido
noches en que te recuerdo
noches en que te odio
y hasta noches en que te añoro
haciéndote el amor
entre los funestos sueños
de vicisitudes sin decoro
 

*      *      *

 
MORIR


Morir
como muere la flor
en el umbroso atardecer
deshacerse
como el viento deshace el castillo de arena
sentir el olvido
que agreste me olvida y me humilla
silencio mi aliento rompe la abrupta palabra
fantasma cruel que el cielo traspasa
dolor por añorar el recuerdo bueno
que el ogro del bosque se lo tragó
¿que soy?
un poco de muerte
arropada con el engaño de la palabra
un poco de vida cobijada
con el aliento
que imbatible se extingue
para convertirse por siempre muerte
en el eterno momento
 

*     *      *


SOLEDAD URBÍCOLA


compungido
en medio de esta gran ciudad
soportando la abrupta soledad
buscando
un poema pegado a la pared
o una hermosa mirada
que me quiera iluminar
 
pero nada
todo parece bazofia
horrendos escombros sin razón
que a zarpazos
matan un aterrado corazón
 
busco tantas cosas
un beso tierno
una sonrisa de quimera
un cuerpo escultural
y algún deseo por realizar
pero nada tengo
sólo un dolor funesto
de una miseria canicular
 
derrotado
deambulo solitario
desterrando la pequeña pústula
del último aliento
del suspiro postrero
del audaz pensamiento
 

*       *      *


NOCTURNAL


Ahí estuvo tu cuerpo
Tibio
Trepidante
Y mío
 
La noche fue nuestra
Y el caramelo en nuestras bocas
Deshizo el ruido
Entre el espasmo y la caricia
 
Las pieles se hicieron una sola
Los murmullos desgarraron la noche
Más besos y caricias
En una pléyade del derroche

 

*      *       *


CANINOS
 

Para Kira y Miro
bellos caninos que no olvido


Todos los caminos que alegres anduvimos
entre la canícula
entre el polvo del camino y el barro del sendero
entre el regaño y el juego
entre el cansancio y las caricias
con el agite al encontrar otros caninos
y la curiosidad de los bovinos
que en las largas y hermosas caminatas
acechaban con sus ojos grandes los caminos
tú y ella blancos y puros amigos
con el único interés de recibir una galleta
sentados como premio a la obediencia
sin importar los ojos negros ni los ojos verdes
que me hacían desbordar de ternura
y a ratos perder efímeramente la paciencia
 

*     *     *


SOLO ANTE LA NATURALEZA


Solo ante la naturaleza
mi alma se desnuda
buscando el recóndito aliento
que en la inmensidad se pierde
gotas de efluvio senil
que descienden con recuerdos
unos alegres y otros tristes
inmensidad que a lo lejos vuela
entre nubes danzantes
entre vientos pasajeros
como pasajera es mi vida estática
glaucos campos de color infinito
que rememoran unos ojos verdes
cielos que se extienden vaporosos
al color de unos ojos azules
soledad... soledad del corazón
soledad... soledad del alma
todo parece insólitamente fenecer
todo sin pausa va llegando a su fin
cuando la incertidumbre
abraza férreamente un corazón triste
que se hace cruel e infinitamente desesperado
cuando se pierde del todo la ilusión
y el destino sin pudor nos enviste
corazón... corazón
cuánto diera para que jamás vuelvas a estar triste
añorando los besos que se disolvieron en la tarde
sentimiento de nostalgia por un hermoso cuerpo
qué fantasmal huyó por las praderas
corazón... corazón
la tristeza no es de ningún modo alarde
ni tardes de ilusiones pasajeras

 

*       *     *


LA CIUDAD


Llegué a una ciudad fría y extraña
en donde todo el mundo andaba presuroso y con miedo
raudo y hasta con inquina y odio
en donde la bruma ocultaba plena la identidad
y de paso escondía el temor al olvido
corrían las calles al anochecer
entre manchas de licor y disimulada fiesta
para olvidar el dolor del oprobio
y hacerle un monumento a la estupidez
y sin contemplaciones cubrirlo de jolgorio
extraña la fría ciudad a donde llegué
la misma en donde nací
la misma en donde he vivido todos mis años
de angustias y de alegrías
pero ahora desconocida con gente enmascarada
que aún se atreve a sentarse en el sardinel
y saltar con entusiasmo sobre el pavimento
a tomarse una botella de licor y fumarse un porro
porque a pesar de todo
todos quieren morir felices
olvidándose de todo lo que existe
sin remembranza de que son autómatas
cosechados por el despiste
la extraña ciudad que es mía
me convoca al sueño de la incertidumbre
con pesadillas de tiempos mejores
y un futuro anquilosado y sin lumbre

 

*      *      *

OPACO


Opaco el mundo
me desborda la tristeza
y la inquietud de tus redondeces
me recuerdan el mundo triste
de tu ausencia
Cúspides celestes
que todo lo abruman
constelaciones que me llevan a tu sueño
y eres carne que anhelo
en el furtivo beso
Ven a mi solitaria cama
invadida de tus recuerdos
y permite que el mundo discurra
entre las nubes de nostalgia
de ojos tristes que te añoran
Quiero traspasar las dimensiones
subir las escaleras de caracol
encender la luminosa lámpara
de tus venustos ojos
para que mi mundo no sea opaco
para que mi mundo contigo no sea triste
 

*      *     *

MORIR


Morir
como muere la flor
en el umbroso atardecer
deshacerse
como el viento deshace el castillo de arena
sentir el olvido
que agreste me olvida y me humilla
silencio
mi aliento rompe la abrupta palabra
fantasma cruel que el cielo traspasa
dolor
por añorar el recuerdo bueno
que el ogro del bosque se lo tragó
¿qué soy?
un poco de muerte
arropada con el engaño de la palabra
un poco de vida
cobijada con el aliento
qué imbatible se extingue
para convertirse por siempre en muerte
en el eterno momento
 

*     *     *

ASÍ SOMOS


Así somos
de la tierra
y del pan
efímera luz
que traspasa
la eternidad
 

*      *       *


NOS HICIMOS VIEJOS


Nos hicimos viejos
pero el tiempo por ahora no nos deja
no olvidamos de las andanzas
cuando cada vez es más grande el recuerdo
traspusimos caminos sin memoria
y probamos bocas de ensueño
de los bellos ojos que cerraron sus párpados
para disfrutar los torrentes de la pasión
aparecieron las canas y las arrugas
y se fortalecieron los sueños
monstruos postreros
que volaron mil desiertos
y soportaron mil sequías
 
Nos hicimos viejos
pero el tiempo por ahora no nos deja
porque ser viejo no es pecado
como los indolentes piensan
ya sabios dulces habrá en el Olimpo
de blanca y luenga barba
de mirada que todo lo intuye
en el oráculo de las sibilinas
del viejo que da la mano
para que subas con apoyo al collado
 
Mantuvimos senderos de flores y espinas
probamos las gotas de miel
y esparcimos lágrimas de sangre en el horizonte
nos deshicimos entre las pieles de amores imposibles
entre los orgasmos de fragancias perennes
aquí estamos entre sonrisas y dolores
entre este insólito misterio que se llama vida
Aquí estaremos hasta quién sabe cuándo
siempre recordando que desde el primer día envejecemos
y recordando que algún día el tiempo
sin pausa y apremio nos dejará hasta desaparecernos
 

 
*      *       *

 
VAMOS


Vamos a algún lado
tomados de la mano
Vamos al confín del universo
a este mundo o a uno diverso
Vamos al bosque de las ilusiones
en donde vuelan los corazones
Vamos tomados de la mano
a la cama de tibio y dulce abrigo
no dejemos al tiempo pasar en vano
y déjeme siempre disfrutar contigo
 

*     *     *


TUVE MI PROPIA NOCHE


Tuve mi propia noche
invadida de dolor y desidia
y la lluvia golpeó iracunda las calles
y espantó a los gatos de los tejados
los sonidos del silencio se hicieron estridencia
mientras el mundo impertérrito giraba
giraba mi mente alrededor de los recuerdos
y giraba mi corazón con desazón y miedo
y afuera no paraba de llover
y el sonido de la lluvia rompía el silencio
al sentir las gotas con desesperanza caer
pero el mundo no piensa
él es solamente lo que es
no le interesa ni la marcha ni la protesta
ni siquiera si hay una cama vacía
o un lecho repleto de amor
o las calles atestadas de odio
 
Ahora la calle está vacía
¡qué mentira!
los riachuelos que arrastran el lodo
amarillos invaden la avenida
es un solo mundo impasible con su agonía
mientras unos y todos quisieran ahogarse en la sentina
y la lluvia cae sin cesar entre los baldes
que las señoras han puesto debajo de las canales
pero lo peor está por suceder
pues hoy por la ley seca don Prudencio no abrirá la cantina
ya que todo se debe cerrar antes del anochecer
 

 

Derechos reservados

M. BERMAR

Noctambulismos e Irreverencias
29 de enero de 2021
En el lugar en donde se alberga mi corazón
oscuro sentimiento que se hace inspiración