DAVID GIRACCA -ARGENTINA-

PÁGINA 17

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Soy escritor y compositor autodidacta, nacido en Argentina. Tengo 43 años y resido en Castelar, Provincia de Buenos Aires.
Escribo desde mi niñez, mayormente poesía y canciones. La literatura y la música siempre han sido mis pasiones.
Participo activamente en grupos literarios de redes sociales desde hace 2 años.
Algunos de mis poemas han sido publicados, como colaboraciones, en diferentes revistas literarias virtuales de distintos lugares del mundo.
Así mismo, algunas de mis obras han sido declamadas en programas radiales dedicados a la prosa y la poesía en Latinoamérica.
Actualmente he participado en una antología poética, de formato físico, llamada: Atrapaversos, de la editorial Puerta Blanca de Argentina.
Y cuento con un libro terminado, de poemas, esperando ser publicado.
Pueden seguir mis publicaciones en Instagram (@DavidGiracca) o en Facebook, como David Giracca.
 

LLOVIZNAR COPIOSO
 
Lloviznar copioso es el recuerdo de tus besos
que nutre las ásperas raíces de mi alma,
en la oscura noche que inunda tu ausencia.
 
Sólo las notas de un piano fantasmal
en el melancólico vendaval de esta tormenta.
Vestigios de luz, que ayer fueron esperanza,
se extinguen del otro lado de la calle.
 
La nostalgia y los recuerdos,
los sonidos ya olvidados.
Todo es mortecino y helado.
Me aplasta la noche oscura de tu olvido.

 

*     *    *


TE ESCRIBO….
 

Te escribo con los dedos quebrados,
ya desgastados,
tras delinearte en tantos versos.
 
Intentando describirte,
sin nombrarte.
Con los dedos sangrados.
 
Tal vez no supe comprender,
el calor de tu mirada a tiempo,
por eso tan mío,
de no haber aprendido.
 
Aún aguardo el descanso,
de llegar a tu encuentro.
Sumergirme en tus cuencas,
vaciar mis vivencias.
 
Y así volver
una promesa incierta.

 

 

*     *     *


 
LA GUERRA
 
La guerra siempre es absurda,
pues sólo hay perdedores.
Es la ambición cegadora,
la que todo lo destruye.
 
Es injusta tanta sangre
derramada entre hermanos,
divididos por cuestiones
que corrompen al humano.
 
Tanta pérdida en familias,
destrozadas y arrasadas,
sufrirán las consecuencias,
irreparables al alma.
 
Tanto camino ha andado
la humanidad en el tiempo,
y no se aprende de errores
que se siguen cometiendo.