CLAUDIO HORACIO COMESAÑA -ARGENTINA-

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PÁGINA 60

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El poeta Claudio Horacio Comesaña, nacido en Buenos Aires- Argentina, un 7 de septiembre del año 1961. Si bien no ha escrito libros, desde hace muchos años se encuentra ligado al arte literario habiendo creado muchos grupos de poesía y siempre ha estado apoyando a quienes abrazan este maravilloso mundo de la expresión a través de las letras, siendo hoy muchos/as que siguieron por esta senda teniendo sus hijos literarios, (sus libros) y eso es algo que lo llena de orgullo y satisfacción, porque si bien pasó mucho tiempo aún en el presente se lo siguen agradeciendo. Ha sido innumerables veces declamado en emisoras de todo el mundo, ha participado en revistas literarias tanto nacionales, como internacionales. Se autodefine como: "Un Eterno Aprendiz De Poeta" que se expresa con sus letras dejando por donde pasa una huella imborrable e indeleble, porque está hecha con y desde el corazón. Se caracteriza por ser un poeta prolífico, pues sus creaciones ya suman más de 2000 poemas, donde les imprime toda la magia que emana de sus venas, cual roja tinta, fluye de su pluma que habla por él, aunque permanezca en el silencio de aquellas sombras que se difuminan llenas de luz propia. Fase que me aompaña desde hace muchos años "No soy lo escribo, soy lo que sientes al leerme"
 

 

EL VIEJO COSME

 
El terror se apodera de mí al recordar aquel mito urbano que cuando era niño contaban los mayores.
La casa de al lado hace años permanece cerrada e inhabilitada por creencias de lo que allí pasaba según cuenta la leyenda.
 
Hubo muchos casos de niños que desaparecieron y jamás nadie supo de ellos, en esa casa moraba un hombre de unos 75 años, reacio, parco y solitario a quien no le gustaba socializar con la gente.
 
Siempre vestía de negro cual monje, con sombrero del mismo tono, piel muy blanca y su cara demacrada y ojeras que lo hacían ver aún más lúgubre como la casa que habitaba, totalmente descuidada, sin pintura desde hace años, puertas y ventanas agujereadas por culpa de los atrevidos chicos que tiraban piedras contra la casa de ese maléfico viejo, como lo llamaban.
 
Con los únicos que simpatizaba era con los niños a los cuales les hacía juguetes artesanales hechos con sus propias manos y siempre con golosinas los atraía, pues sabía que ante eso los mocosos sucumbían y así perdían el miedo no pensando nada malo del viejo.
 
Todo empezó un 1.º de noviembre cuando desapareció Jhonás un niño de 8 años al cual vieron por la casa del viejo pidiendo dulces y de ahí cual humo desapareció sin saber más nada de él.
 
La denuncia no se hizo esperar, los padres con la policía llegaron allanando la casa del viejo, dando vuelta a todo, pero nada se descubrió y don Cosme tranquilo contestaba todo lo que le preguntaban, los perros tampoco encontraron algún rastro y lo dejaron ir, ya que no había evidencia de que ese niño estuviese en esa sombría casa húmeda y mal oliente.
 
Eso siguió pasando durante varios años y como siempre nada encontraban y siempre el mismo procedimiento.
Hasta que un día antes del 1° de noviembre lo encontraron al viejo apaleado y muerto a golpes por la turba que hicieron un pacto de que nadie diría nada de lo que allí pasó y que habían hecho como bárbaros dejando salir lo peor de cada uno.
 
Ironías de la vida, pues cuando al viejo lo mataron dejaron de desaparecer niños, pero en verdad pasados diez años de la última desaparición encontraron evidencia reveladora en una casa cercana a la del viejo, donde habitaba un pastor muy respetado por su comunidad, hallaron un altar con la foto de cada niño, además el piso se veía con signos extraños, porque allí yacían los cadáveres de los pobres e inocentes niños desaparecidos.
 
Reflexión: No siempre lo que parece obvio es la verdad revelada, don Cosme era un ser amoroso con los niños y nunca jamás les hizo ningún daño, en cambio, el pastor hizo con esos niños estragos antes de darle muerte aprovechándose de su respetable condición.

 

 

THE END

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Autor: Claudio Horacio Comesaña
Seudónimo: (Tu Ángel En Las Sombras)
Correo Electrónico: claudiohoracioc@gmail.com