DAIMY DÍAZ LABORDA -CUBA-
PÁGINA 13
Miembro de la UNEAC (Unión de Escritores y Artistas de Cuba). Licenciada en Estudios Socioculturales. Egresada del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso. Tiene publicados “La primera pandilla de pollos piratas” (Editorial Ácana 2009, D McPherson Editorial 2019), “Rosalía” (Editorial Ácana 2012), “Pelúa Pérez” (Editorial Ácana 2020) y “Duendes del domingo” (Editorial Primigenios 2020). Un cuento suyo fue seleccionado para la antología “Todo un cortejo caprichoso. Cien narradores cubanos” de Ediciones La Luz, 2011. Poemas de su autoría pueden encontrarse en el No. 20 de la Revista Literaria y Artística “Poetas por la paz y la libertad” de la UMPPL (Italia, Enero, 2023) y en el No. 52. de la Revista El Creacionista (Puebla, México, 2023). Participa con tres poemas en la antología “Colibríes sobre Mares” en proceso de Edición. Un cuento suyo fue seleccionado para la antología “Té por Limón. Textículos Eróticos” de Erótica, Jungla House, (Publishing House, Estados Unidos de América, 2023).
Suposiciones[1]
No plasmaré
con letras
el vuelo
retrasado
de un ave
a media tarde,
ni las causas
de su soledad,
o los motivos
que pudieron
detenerla
sobre la nube.
No calcularé
las brisas
que acarician
el pico,
el dibujo
del paisaje
en los ojos
o el sonido
mudo del ala.
Quizás,
interrogue
al marino
que la persiguió
con el catalejo
o al agricultor
que la descubrió
mientras
buscaba
la lluvia
en lo alto.
No preguntaré
por razones
de arcoíris
ausentes,
o llanuras
sin relinchos.
Si acaso
escribiré
que hay aves
con deseos
de perder
el rumbo.
* * *
Corazón de tela
“Vierte, corazón, tu pena
Donde no se llegue a ver…”
José Martí
Tengo
un corazón
índigo
en lo blanco
del pecho.
Incrustado,
de tela,
el borde
grueso,
cosido
a mano.
Un corazón
que no late,
torcido
y azul.
Cerca,
muy cerca,
en el lado
derecho,
uno más
pequeño,
añil,
de tela,
zurcido
a mano,
que tampoco
palpita.
* * *
Fotos
Enmarco
un collage
de fotos
sobre
un mapa
sepia.
Fotos
actuales,
en tanga,
sobre
un mapa
sin cruces
de tesoros
ocultos.
Fotos
de cortinas
rojas
y flashes
tímidos,
invadiendo
el sepia
de un mapa
sin latitudes.
* * *
Miedos
“…en sus muslos la muerte
ha dibujado un templo…”
Carlos Galindo
Hieres,
y el pájaro
que anido
entre
mis senos,
tiembla
de miedo.
Sus plumas
perdonan
la tristeza,
y la flecha
se
des
ha
ce
malhechora
entre mis
piernas.
* * *
Formar borrones
Para Aldo R. P. S.
“…sonríe para mí con la elegancia
de quien toca un ala o roza
el borde de la luna…”
Gleyvis Coro Montanet.
Mientras
sonríes
la luna
me regala
sueños
de futuro
y un abrazo.
Llega
la melodía
que cambiamos
por soledad,
se convierte
en himno,
y evita
que las
pesadillas
tropiecen
con el lápiz
y formen
borrones
sobre
este papel.
* * *
Soborno de búhos
“…A la espalda del reloj
correr es un insulto
una vuelta al lado inequívoco…”
Yordanka Morciego
Cuando el tren
parta de
la estación,
el gato,
cruzará
nuestras
miradas
y volteará
para sonreírnos,
mientras
nos habla
de selvas,
copas de vino
y propone
cambios
de senderos
por maullidos
nocturnos.
No acepta
soborno
de búhos
ni susurro
de penachos,
anhela
el paseo diario
de la locomotora,
el adiós de
los pasajeros,
y las sombrillas
cerradas
mientras
cae la lluvia
sobre
sus bigotes.
* * *
Isla de espera
“…suspendida
al borde de un beso…”
Daína Chaviano
Rescataré
un beso
en el mar
de las dudas,
seremos amigos
de huracanes,
jugaremos
en la arena.
Con las raíces
del cocotero
como testigos,
recitaremos
promesas
húmedas,
y las
esconderemos
junto
a las caracolas.
En la noche,
crecerá
una hoguera
en la orilla,
enorme,
para que
puedas verla
en la distancia.
Abrazados,
el beso y yo,
trazaremos
mensajes
con la punta
de una rama,
por si el tiempo
nos pierde,
sepa el náufrago
que lo esperábamos.
[1] Estos poemas forman parte de un cuaderno inédito, titulado Isla de Espera.