FEDERICO MENDO SÁNCHEZ -PERÚ-

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Federico Mendo Sánchez, nació en el Departamento de Cajamarca – Perú, actualmente reside en la ciudad de Lima. Mi padre fue un curtido pescador, mi madre una mujer dedicada a su hogar y a la crianza de los hijos. Soy miembro de la Marina de Guerra del Perú,   cultiva el arte de la poesía desde su época escolar, ha participado en distintos eventos poéticos durante su etapa estudiantil. Ha ganado varios concursos inter escolares representando a su centro de estudios, fue ganador en los Juegos Florales del año 1989 en la Marina de Guerra del Perú, participó en los eventos Grito de Mujer de los años 2019 y 2020 de la ciudad de México, también en Tertulias Literarias a nivel nacional e internacional, por el momento es miembro del Grupo Academia Literaria Surco y Semilla de Colombia y también en Un Poema y un Recuerdo de Perú.
Tiene en preparación su primer poemario, deseando que todo le salga bien en este mundo literario


 

 

 

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ME BASTÓ UNA TARDE
 
Me bastó una tarde para conocer tu sonrisa,
para mirar tus ojos color del capulí,
tienes el alma que enamoras tan de prisa,
y tienes el encanto de una bella cuculí.
 
Me bastó una tarde para leer tus ojos,
y sentir que están llenos de felicidad,
te quedé mirando y noté que tus antojos,
lo guardas muy dentro con tu sinceridad.
 
Me bastó una tarde para sonreírte,
y decirte que eres bella y tierna de amor,
te robé una sonrisa y pude mirarte,
que escondido llevas un hondo dolor,
 
Me bastó una tarde para mirar tu encanto,
y decirte cosas, mirando el atardecer,
hoy te tengo lejos y me aflora el llanto,
porque te recuerdo y empiezo a padecer.
 
Me bastó una tarde para ver tu alegría,
aunque al siguiente día ya no te pude ver,
solo tengo noches y tengo muchos días,
que vivo pensando, si te volveré a ver.
 
Me bastó una tarde para complacerte,
y con una sonrisa robarte el corazón,
yo paso mis días, sin querer perderte,
y te llevo en mis noches en mi oración.
 
 *      *      *

 
CULPABLE SOY YO
 
 
Si acaso me contradigo,
en este confuso error de amar
y quieres saber tú ¿de quién es la culpa?
pues... culpable soy yo.
 
Pero también tú eres culpable,
porque sembraste amor y te alejaste,
algún día tu conciencia te remorderá...
pero que importa. al final... culpable soy yo.
 
Pues llevo en mi alma la cruz de tu amor
y voy muriendo en mi profunda pena
siempre viviré con tu recuerdo,
si al final,... culpable soy yo.
 
No importa que mañana sea diferente;
y me mires con desdén mal concebido,
quedando nada más de lo vivido,
aquel recuerdo de ser yo el culpable.
 
Sentí tus ojos que a mi vida dieron,
la esperanza de seguir con mi destino
y fueron la constante que hicieron,
que me sienta culpable siempre yo.
 
Dentro de mi corazón existirá cada día,
el sentimiento de amarte cada vez más,
aunque el fuego de nuestro amor quede en cenizas,
no te olvides... culpable soy yo.
 
Así es el destino, así es mi vida,
más nunca te podré olvidar,
la muerte me llamará, y tú te quedarás
si al final de todo... culpable soy yo.
 
Acuérdate de mí, eterno amor,
porque mi vida no podrá vivir sin ti,
te vas, tu olvido no podrá más que mi amor
por eso te digo...  culpable   soy yo.
 
*       *     *
 

DE QUIÉN ES LA CULPA


De quién es la culpa, para que yo te quiera,
para que yo no pueda, vivir sin ti,
quien acabó mi fe, para que en mí muriera,
aquel buen olvido que existía en mí.
 
De quién es la culpa, para que yo creyera,
que todos los días junto a ti iba a estar,
de quién es la culpa, para que yo sintiera
que en el fondo del alma, no te puede olvidar.
 
De quién es la culpa, para que mi sentimiento,
viva siempre creyendo, que nací para ti,
y que tú acabarías con todo mi sufrimiento, 
pero quiero decirte de una vez, que no es así..
 
De quién es la culpa, para que yo te llame,
y en las tardes te busque, como el ave a su nido,
de quién es la culpa, para que tanto te ame
y seas tú mi suerte que yo haya elegido.
 
De quién es la culpa, para vivir pensando,
pues cansado ya tanto, no logro entender,
que aunque no te tengo, yo te sigo amando,
dime de quién es la culpa, tú debes saber.