SANDRA PATRICIA POMPA SARACHO -MÉXICO-

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PÁGINA 56

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SANDRA PATRICIA POMPA SARACHO
Sandy Pomps cuenta con varias publicaciones a nivel nacional.  Sandra Pompa escribe desde la creatividad y la madurez intelectual. Combinando mente y corazón, les da forma a las palabras para producir redacciones elocuentes, con fundamento y carácter. Actualmente reside en monterrey donde dedica sus días a escribir desde su trinchera.
 

 

Sandy Pomps

 


No existen palabras para narrarte más que mi cuerpo. Un cuerpo marcado por el silencio de tu voz, pero perpetuado por el tacto voraz de una pasión que alimenta al tártaro.  Una mirada que refleja el abismo del deseo más profundo del alma mía, despertado en la oscuridad de una soledad que no se encuentra. 
Tuve que dejar de ser mujer para ser tuya. Tengo que dejar de ser tuya para hacerme mujer. 
Mi boca solloza entre murmuros la discrepancia entre razón /acción. ¿Cómo puede ser, amor, que estallando de estremecimiento mi mente y alma, tu corazón se llene de hiel al pronunciar mi nombre? ¿Cómo ha de ser posible que tu carne se entregue a mi carne día tras día, año tras año sin que mi cuerpo humedezca tu sentido? Acaso no resuena mi voz al tacto tuyo, no son mis pechos los que florecen y estallan de juventud cuando me estrujas en deseo.
No te quería eterno, te necesitaba cierto.
Preciso en el momento de la desolación, del desamor, del olvido de que fui mujer, de que soy mujer, de que quiero sentir. Quiero sentirte amor. Entre mis brazos, en un suspiro de amor sin ataduras, sin prejuicios, sin nada, sólo amor.  Quiero sentirte amor, en mi vientre, en la profundidad de las entrañas que me hacen amarte en el pecado. En esa oscuridad que me desviste la moral y me deja desnuda, entera, para encontrarte en el rocío de una flor que languidece en el olvido.
No tengo palabras para narrarte más que mi cuerpo. Ese cuerpo que has dejado tumbado en la sinrazón de la indiferencia.  Esos muslos que se estremecen de ti, de tu presencia, de tu cuerpo, de encuentro. Paralizados en el miedo de correr y perder ese instante sacrificado del Edén. Amando en el limbo entre infierno y gloria. Tú y yo atados al yerro del deseo.  Pero tú, estabas ausente. Tu cuerpo no era cuerpo, tu alma estaba vendida mutilada en los sentidos. Tus ojos ciegos de mí, lanzando miradas de pasión atrapadas en ese vacío que llevas en el pecho. Tus manos, que no sentían la silueta del deseo. Tú cuerpo que no era tuyo, un cuerpo petrificado por el veneno de medusa. Hecho de piedra para grabar con sangre en mí reflejo la letra marcada del pecado. Para llenarme de olvido, para sacrificarme a las multitudes. Para olvidar mi cuerpo.
No tengo palabras para narrarte más que mi cuerpo, mi alma y mi ser que te sintieron eterno un instante, en el tiempo.
---SP-

 

 

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Locus amoenus.

 
En busca del lugar perfecto las cosas me hablan de ti.
Un viejo tranvía llamado deseo me dijo que aún no es tarde para amar.
Me llevó al anfiteatro de Momo, quien custodiaba el tiempo, y me dijo que el universo como el amor son atemporales, que no hay tarde, ni temprano. Sólo existe hoy.
La manecilla de su reloj me llevó a una banca con vista al infinito. Donde el cielo se mezcla con el sol en un reflejo.
Y entonces supe que anhelaba tu mano. Que quería enseñarte todos estos lugares mágicos donde puedo ser yo. Y bailar y cantar y leer y gritarte poemas en el silencio de un suspiro.
Te regalo mis fotos. Y te espero donde el cielo se besa con el sol.
Besos de luna llena
---SP-

 

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Rezo al viento


Me despertó tu murmullo de mar.
 tu caricia / brisa que apenas se dibuja en mi cuerpo desnudo.
Me estremezco en tus brazos
Escuchó tu canción a la distancia -torbellino de recuerdos de hojarasca-
Te abro la ventana,
Cierro los ojos y te siento en mis pechos -frio y suave-
Suspiro todas las veces que somos uno.
Abrázame esta noche, arrastra mis lágrimas en tus ráfagas de olvido.
Dame un beso siroco antes de dormir y mece mis sueños en un suspiro.
---SP-

 

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Haciendo del amor silencio


Haciendo del amor silencio me imagino tus besos mientras el agua corre por mi cuello.
Evaporando el deseo en un pensamiento, te espero en esa ventana que guarda la distancia de nuestros cuerpos.
Miro el correr del agua, haciendo remolinos perpetuos en el abismo.
Una distancia y dos miedos.
Un sin miedo para sentir tu amor.
Una caricia que me limpia el alma mientras el jabón se disuelve entre mis dedos.
Me tomas de la barbilla, mi cara mojada por el tiempo, tu voz, tu cuerpo...
Me das un beso en la frente y te difuminas en la espuma que recorre mis muslos, ávidos de ti.
De nosotros
Haciendo del amor silencio, te borro de mi mente, te olvido. Te cuelgo en el último recuerdo de un amor fallido. Ahí me esperas, inmóvil hasta que el agua recorre mi cuello y mi alma imagina tus besos.
---SP-

 

 

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El huevo de Eros

 
 Me preguntaba qué era el amor. Y sólo recordaba esa desbordante pasión que arde y quema en el pecho.
Y luego…. Luego llegaste tú.
 Cada mañana una sonrisa, una palabra, una mirada. Me detuve cautiva en tu presencia.
Te observé.
Respiré cada frase, cada paso, cada beso en la mejilla.
Me fui entregando toda yo inmaculada. Cada pensamiento, cada suspiro, cada miedo.  Te cocinaba un sentimiento en cada plato.
1001 desayunos me valieron para saber que te amo. Que mis mañanas en tu mirada son el mejor puerto para mi alma. Que tu abrazo era vid de esperanza para mi corazón marchito. Que el amor no necesita cuerpo, el amor está hecho de huevos fritos y un beso tuyo en la mejilla.
Hoy te abro mi caja de pandora para decirte: te amo.
Te amo así cada mañana. Ajeno. Cada segundo. Amigo. Y quizá por el resto de esos desayunos vacíos que siguen después de hoy sin tu presencia.
Te regalo mis anhelos disfrazados de un poema; para que lo cuelgues de tu almohada cada que tengas hambre.
Te regalo un beso de espuma blanca que guarda el deseo de hacerte mío.
Y te regalo mi última mirada. En ella te guardo todo el amor que nunca podré darte.
Te regalo también mi receta de huevos fritos por si acaso un día necesitas ser amado.
Y te regalo este amor sin cuerpo, pero sí entregado.
---SP-

 

 

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Tu voz me suena en el café


Y la mañana
Y el tiempo
Y entonces comienzo a leer del Dios, del diablo de Blake y me pierdo en un abismo.
¿Cuáles demonios guarda mi alma?
Y por qué te encuentro en el infierno.
¿Cuáles dioses se esconden en mi alma?
¿Y por qué te encuentro en el vergel?
Porqué caminamos de la mano en cada pensamiento.
Por qué no te tiras a un abismo y renaces como fénix, Ángel caído para gobernar mi infierno.
Un beso de fuego y una entrega para purificarnos. Para hacer del instante oro y con eso alumbrar el paraíso.
Un café de mañana, un libro y una voz a la distancia.
---SP-

 

 

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Como Prometeo, yo mujer fuego.

 

Entendí que soy abismo. Que sin la oscuridad no existe luz.
Te quería enseñar amaneceres, pero vivo de noche y sólo tengo reflejos de sol. Retratos de una luna que muta en sincronía con mi alma.
Te veo lejos en cielo y me pregunto si tus rayos alumbraran mis cuevas más temidas.
Tengo dragones que me custodian, hay gigantes que encadenan mis alas. Me he convertido en lámpara de inagotable aceite y alumbro las tinieblas.
Como Prometeo, yo mujer fuego.
Aquí estoy. Sentada en la noche con una chispa de llama etérea. Te veo a lo lejos. Y estiro mis brazos sombra para que te cobijen.
Así, en ese tu mundo. Yo soy la sombra que te acaricia el cansancio, que te refresca. Para luego volver al abismo y postrarme en las cadenas de los gigantes con un ojo.
Te regalo una pluma de mis alas vencidas para que dibujes mi alma en el cielo. Hazme estrella fugaz en tu deseo.
Soy tu noche.
---SP-

 

 

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Madrid


A la distancia te escucho murmurando mi nombre. Recuerdo tus ojos de pintura barroca. Tu pelo. El tiempo.
Una ilusión suspendida en el espacio estático del deseo.
Me abrazo al furor de la juventud donde tomaste mi mano y saboreamos el atardecer del primer beso.
Te beso.
Te escribo, Me escribes.
Surfeamos la Marea de Cronos.
Nos hemos hecho inmunes a los años y a la realidad de una vida hecha.
.......
Quiero terminar. Pero somos eternos.
Te encuentro en la esquina del deseo.
---SP-

 

 

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Me voy dibujando la vida


Hoy desperté inevitablemente pensando en ti. Y me di cuenta que te dibujo en todos los lugares donde te recuerdo. En mi cama con sábanas de lienzo, en la cocina con sus vapores esperándote, caminando a mi lado a la orilla de un río. En el café de la mañana.
Te voy difuminando en acuarela de caricias cálidas y promesas frías. Diluyo el pensamiento para ser libre de ti. De nosotros. De lo efímero que es el amor y sus motivos.
Boceteo una vida sin ti y la voy coloreando con el pasar del tiempo. Ese tiempo, ese universo donde no estás.
Y aún que te dibuje toda mi eternidad me voy dibujando la vida sin ti.

 


SANDRA PATRICIA POMPA SARACHO ©
SANDY POMPS
MÉXICO D R A