JOSÉ LUIS GALARZA -ARGENTINA-
PÁGINA 10
La belleza del mundo
La belleza del mundo
ingrávida está en el aire
temblando en lo invisible
profana en la tragedia
la terquedad de la luz y
la belleza siega la maleza
y brota en los sentidos
el éxtasis confirma
la vida de todo en nosotros
en la incomprensión
hay más sentido
la belleza del mundo
en la duda clavada
en los nervios
la posibilidad en lo visible
la piel también en lo invisible
la piel
salvajismo, no durazno
la piel del viento y su bosque
en el acantilado siento el viento
lengüetea su lenguaje
y resquebraja la tierra en mi cuerpo
atomiza la cosecha y el hambre crece
el hambre crece.
* * *
Identidad
La identidad es
un rompecabezas
con piezas que no encajan.
Una lectura atomizada y
el descubrimiento
* * *
Dudemos
Dudemos de la belleza
y de la perversión
de la misantropía
y la poesía
de las marchas
y el nacionalismo
las alineaciones son
astronómicas y excepcionales
las absolutas son novelas.
Dudemos de la historia
novelada.
* * *
Arquitectos
Somos todos arquitectos de disímiles galerías, atemporales asilos.
Algunos limitamos las maquetas a sueños al alcance de los sentidos.
Otros cernimos las maquetas a ladrillos al alcance de los ojos.
Veinte años sin percatarnos del paso del tiempo en el croquis,
pero de las ciudades invisibles resultan los materiales más nobles.
* * *
Revolución del silencio
Hoy escribo porque es una forma
entre tantas
de comunicarme en voz baja
de encauzar los secretos que
siguen siendo silencios
de alguna manera quiero liberarlos
un acto de verdad revolucionario
es la revolución del silencio.
* * *
Forma de la crueldad
Un ente después de probar la crueldad
* * *
Dónde residen los gritos
Este es el lugar para gritar
y que los gritos tomen forma
de un lenguaje conocido
perder el temor a vibrar /
avispas en el túnel
de lo que reste de voz
libera el grito que recobre
el derecho a propagar
la presencia de las cosas
y recuperar el ambiente
en este mundo
sobra silencio
* * *
La hilandera
La hilandera conjetura un orden en el telar,
un relato en ebullición acaece,
la vergüenza y el temblor del suelo.
Estamos a la espera de una verdad más grande,
a la espera de una noche más intensa.
* * *
Temas de interés
“Temas de interés”.
¿Qué hipocresía?
Es de interés lo indecible,
lo intocable,
lo marginado,
lo subyugado,
lo aplastado,
lo ilegible,
lo borroso,
lo incompleto.
Todo lo contrario
a lo repetido
hasta desgastar
la suela del optimismo,
hasta minar la conversación
al nivel del eructo,
hasta jubilar la palabra,
hasta limarla, vencida palabra,
purga los restos de humano.
* * *
Que quede
El canto me quede
en la última razón
El baile me quede
en la primera ley.
El canto sin voz,
El baile sin fuerza.
La bella voz adentro
en parte mía quede,
en parte tierra ajena.
En la memoria quede,
levedad de la voz,
levedad de la danza,
el cuerpo sonoro quede.
* * *
Mi cuerpo interrogante
Este terreno yermo supo ser infancia.
El parque de fantasía más tupido.
Éste es nuestro parque arrasado.
Este terreno por la sequía asolado.
Éste supo ser nuestro parque.
Éste, el parque que retorno.
És
* * *
Fantasmas
No le pasa nada,
no siente dolor,
nada es personal,
no le incumbe,
no interviene,
no observa,
se abstiene de opinar,
conserva la compostura,
exige discreción,
es palenque de la moral,
de irritante cortesía,
de afable rostro,
desaparece,
salvo por alguna aparición
remota, efímera,
como los fantasmas.
Así llega a otra vida.
Habita un hogar
sólo en historias de terror,
es que así la imaginan
traslúcida y pálida
* * *
En el aire
Hoy quiere a tus ojos
en el aire,
en todo el aire.
Concentre el mundo
en lo invisible,
comprime el todo
en lo íntimo.
Con forma germinal
habite el cuerpo.
Copule el sueño
que también es sombra,
proyecte el día,
que también oscurece,
y otros silencios,
que también laten.
Arroje al viento
todo el cuerpo,
germine el aire,
sea su huésped.
* * *
¿A qué llamar amar?
¿Cómo el silencio custodia un sueño
y sella el beso la vida?
¿Es un acto de odio el besar,
sorber un cuerpo en un templo?
¿Cómo enfadarle puede
la belleza de su mujer?
¿Harto precipitado descenso a objeto,
natural la conquista del baldío?
¿El hombre solo habita una mujer,
y el silencio de la tierra yerta?
* * *
La debilidad
Los débiles mueren
pero nunca de muerte natural,
nunca de certeza,
mueren sí de debilidad,
de balas certeras de debilidad.
Perdón, no mueren.
Acribillan de inseguridad.
Torturan de fantasías
para arrebatar libertad.
Masacran de ausencia
para fulminar de soledad.
* * *
Puedo
Hay organismos de control.
¿No hay más que organismos de control?
Señor, usted puede ayudarme.
Quiero comunicarme con la ausencia.
Estos asuntos con un halo místico
sitian el cuerpo, desordenan el espíritu.
Soy un operario, un alma en pena.
¿Entiende?
Señor, usted puede ayudarme.
Admita que…
Entienda que…
Piense que…
Sienta que…
Oríllese a que…
Arribe a que…
Respalde que…
Resígnese a que…
PUEDO.
* * *
La fuerza de lo real
“Nada de lo real puede ser humillado.”
María Zambrano
El sol ocupa en la vida todo el tiempo.
Está en el golpe que la luz desarticula,
pude caer y olvidar lo que está delante
y retener el cansancio que inaugura.
La tormenta anuncia la fuerza de lo real,
con esta ceguera aturde y desmiente,
el viento desprende restos de cuerpo seco,
el viento recoge astillas de sal y muerte,
la tierra ardiente remueve lo real, fortalece
el golpe innegable, la zarza ardiente,
entre cenizas visibles atomizados seres,
agiganta el fuego, aviva el hambre.
Visible desde cualquier ángulo la rebeldía
de lo real, sacude su cola sobre lo falso.
* * *
Cifras de la guerra
En las guerras todo cierra.
Es cifra de un cálculo.
Orden en el escritorio.
La bendición fría de funcionario.
Viola metálica la rebeldía.
Perfora la cubierta humana.
La sobrevida. Inyecta absurdo
en el entorno y agota el lenguaje.
* * *
EPÍLOGO
Informe de guerra
Esta materia es monstruosa.
La cosa tiene vida
y coloca sus ojos
sobre nuestros miedos.
El terror es también natural,
cualquiera puede acostumbrarse
sin resistencia alguna.
El informe de guerra
es un ser espantoso
con el que duermes,
es tu amante.
Con él reservaste todo lo sucio,
todo lo cruel en la dureza,
todo lo insano en la debilidad.
Las vergüenzas lo articulan
en las sombras viscosas
de los silencios
y las guerras.