PÁGINA 12
ABRAHAM MENDEZ YAÑEZ -MÉXICO-
LETICIA Y SELECCIÓN DE POEMAS
-Página 2-
Como pudo se levantó, sin reparar ya en su persona y en lo que había sentido. Se acercó a la puerta para ver qué pasaba…
Doña Tachita murió esa noche tendida en la cama con una sonrisa en el rostro y en sus manos el daguerrotipo de don Juvencio, la foto de la familia y por encima, la foto de ella y Leticia que hacía apenas unos pocos años se habían tomado. De la bolsa del ropón que llevaba puesto doña Tachita, asomaba una carta que había escrito y que siempre llevaba consigo. Leticia tomó la carta y en ese instante la leyó:
-Hijos míos, les dejo todo lo que aquí se encuentra; fueron años de mucha felicidad y también de tristeza… De ires y devenires, pero que, todos y en paz, se fueron superando en el seno de la familia. Ahora estoy dando cuenta al creador, No se preocupen, su padre me acompaña, ya que vino por mí y me dice que todo acá es muy bonito. Les encargo el rancho, la troje, las gallinas y todos los animales… ¡Ah!, y no sean animales, no se vayan a pelear por lo poco que aquí queda, al fin, que son puras cosas materiales que se han de acabar.
De Leticia no me preocupo porque estoy segura que pronto estará con nosotros… No sé, pero lo presiento…
Ella fue mi paz, mi bastón, mi calma, mi pedestal… Fue mi consuelo.
Fue en donde posé frágilmente mis pies; ella fue mi suelo y ahora será mi cielo.
Sólo me resta decirte a ti, hija mía; porque sé que tú serás la primera en leer esta carta, que no tardes mucho, te estoy esperando en el lecho para que juntas descansemos, te quiere, tu madre”
Leticia no permitió que nadie arreglara a Doña Tachita, ella la bañó, la peinó, le puso su vestido de domingo y los zapatos que usaba para ir a misa… La maquilló y le adornó el cabello con una diadema que ella le había hecho cuando era niña y que tenía guardada en el secreter de los recuerdos. Nadie la vio llorar ni decir palabra alguna, se acercó al ataúd, le dio un beso en la frente a su madre y posó la suya en los labios de la viejita, como señal de que también ella la besara y se fue despidiendo de todos.
Uno a uno los hermanos la abrazaron y todos lloraron en su regazo como si ella fuera la matriarca que ahora los guiaría. A cada uno les dio la bendición y les abrazó… El sepelio se cumplió y ella se encerró en casa, a los tres días, toda la familia una vez más se reunió, pero esta vez porque estaban enterrando y entregando a su madre en el panteón del pueblo; a la niña de sus ojos, sus oídos, sus bocas y sus corazones que les permitió vivir tantos años y que ahora ya nada los separaría.
Sólo el destino y la vida saben a quién viene unida nuestra vereda de locura y si esta se volverá algún día al camino que transitaran los cuerdos. Vida y muerte, muerte y vida unieron a Doña Tachita y a Leticia. Todas sus peripecias solo ellas las sufrieron y las disfrutaron…
Estaba más que sabido que aquella tarde que se conocieron entre la tierra y el tapanco de los moloncos, sería un encuentro que jamás las separaría: madre e hija unidas por una estrecha relación que ni la muerte pudo separar.
Dedicado a Tere Zapatos que dio su vida y su ser para cuidar a su madre y el destino la llevó ante ella para hacerla descansar.
* * *
Incluyo los 6 textos que se publicaron en diferentes Ebooks de poesía de denuncia y conciencia En Biblioteca de las Grandes Naciones
TU MUERTE MI PROTESTA
Muerte arrojada del cielo en fuertes escupitajos
Sin tregua o desasosiego al débil y desamparado
No guarda rencor la conciencia, muere mártir nace humano
Se lleva el tiempo la historia para regresarla en gloria o en fracaso
El pensamiento en zozobra la incertidumbre lo ha resguardado
Dime, ¿quién es Betty Cariño?
Que el recuerdo quede claro
Lucha
Fuerza
Ideales
Casa
Tierra
Arraigo
La identidad como escudo, realidad en desamparo
La sociedad no comprende, Oaxaca también es mexicano
* * *
ELLA NO TIENE LA CULPA
Las manos trémulas de dolor y miedo
El rostro desfigurado, manchas carmesí en todo el cuerpo
Pinceladas escarlata que bifurcan su espalda
Y ella aun no entiende que pasa
Se pregunta que hizo mal, que pecado ha cometido
Que le depara la vida, ¿Dios a donde se ha ido?
No sabe del tiempo, mucho menos del espacio en que habita
Se pierde en la oquedad de esas cuatro paredes
Y en la oscuridad que se apropia de sus pensamientos
Por largos momentos llora, ya luego muy poco sonríe
La invaden los recuerdos de alegrías pasadas
Evocando todo aquello que sabe ya no sé revive
Ya no maldice ni se queja, solo espera ese momento
Que la lleve a descansar…
…El sueño eterno
A estas alturas solo piensa que fue una mala decisión vivir en Juárez
Si para ella, morir permitirá dejar vivir a otras mujeres
Que así sea la voluntad de quien pende su vida en un hilo
No hay peor cobarde que aquel que ensaña su odio en la indefensión
Aprovechando su fuerza y su débil decoro
Mal haya de aquel que no respeta la imagen de quien le dio la vida… su MADRE
Al fin una MUJER
NI UNA MUJER MAS DE JUEREZ
* * *
OBSTREPENTES
(En Protesta)
Te juzgaron por lo que eres
Sin medir las consecuencias
Sin buscar a los culpables
Te culpan de tu homicidio
Si no fueran miserables
A los que diste cobijo
No pierdes en los anales
Ni serás la misma historia
Sí viviste en tus cabales
Para quien será la gloria
Si se dice que dejaste
La vida por seguir normas
Demuestren los criminales
¿Quién tú?, serías ahora
No te pierdas entre líneas
Ni dejes tus ideales
Letra muerta no serás
la rosa marchita menos
En nuestra mente estará
la frase que conocemos
'Ni una muerta más'
eres Susana Chávez
así te conoceremos
* * *
PALESTINA SIN EXPLICACION
Tierra fértil emanada de sus ancestros
Que florece entre conflictos, guardando rencores añejos
Se ha vuelto yerma en todos los sentidos
En su tierra, en su gente, en edificios y caminos
Se pierde, se quema, se derrumba en laberintos
Busca incansable aliviar sus heridas
Se juzga, se señala, sin ninguna consideración
No se acepta, ni se comprende su sufrida situación
Entre muertes y ausencias lloran siempre plañideras
Producto de odios viejos, se pierden vidas nuevas
* * *
LA POBREZA
La pobreza fiel amiga de mi infancia
Que acompaño todos mis días y me enseñó a valorar
Me llevo a conocer la dignidad y la vergüenza
Y supe dónde y con quien claudicar
Aprendí a comer con opulencia lo poquito que tenía como manjar
Los frijoles, tres huevitos, dos tortillas y un chile para martajar
Todo eso para cinco panzas y a veces alcanzaba para otros con las tripas hasta atrás
No reniego de esos días de precaria situación
Antes bendigo mis penurias pues hoy me encuentro mejor
Ser pobre no es ofensa mucho menos humillación
Es una constante evidente de la mala distribución
Del poder de los más fuertes y de la falta de valor
De la comodidad e indulgencia de aquellos que te quieren en paz
Pues ofrecen espejitos y solo buscan deslumbrar
El hambre no debe ser solo de alimento
De superación, de hartazgo, de huevos para esas metas alcanzar
No seamos mudos testigos no debemos fracasar
Gritemos el fastidio y empecemos a caminar
No hay vía más difícil que aquella que no se quiere andar
La pobreza no limita, antes te enseña a luchar
La pobreza fiel amiga me enseñó a distinguir del hombre su mezquindad
* * *
LA FALSA CONQUISTA
Conquista mal habida, dejaste mucho que desear
Pues predicabas los valores, la buena palabra, tu idioma y a un solo Dios para amar
Como ave de rapiña esperando a que el fardo se enfríe
Saqueaste lo de más valor y te lo llevaste de aquí
Insaciable animal, cual bestia desgarraste la piel del siervo
España, te erigiste como dueña de las Indias
No te diste cuenta que al defraudar, la engañada fuiste tú
Te llevaste las riquezas
Desgraciaste mis costumbres
Dividiste a mi pueblo
Pero mi dignidad y mi honra nunca pudiste doblegar
Tú hablaste de conquista
Yo te exigí la verdad
Tú solo llegas y esclavizas
Yo grito y te demando libertad
Estigmatizaste a la Malinche
Dignificaste al cerdo nahual
Puta de cuarta, doble moral
Vieja anacoreta, te portaste mal
Abraham Eduardo Méndez Yáñez
Código de registro: 1811038936471
<<ANTERIOR SIGUIENTE>>
