LINDA JANET MELGAR PÉREZ -MÉXICO-

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PÁGINA 28

 

 

Nacida en Estado de México, México.  Licenciada en Interpretación graduada del Instituto Inter- Centro de Estudios Superior Plantel Cuautitlán Izcalli. Tallerista de Escritura Creativa por parte de la Escuela de Escritores de España. Cuenta con una serie de publicaciones: Participación destaca “Primer Nacional Concurso de Cuento con Causa Ángel de Campo”. Cuento seleccionado “Convocatoria Literaria Cuentos de Confinamiento y la Nueva Normalidad - Cuando te vuelva a ver”. Cuento seleccionado “Convocatoria 7 Pecados Capitales” en Cósmica Fanzine. Cuento seleccionado en la Revista Geronte “Convocatoria Tiempos de amar”. Cuento seleccionado “Antología Insomnio-El aleteo de una mariposa” Cuento seleccionado “Convocatoria de Poesía, Relato o Microcuento Bombardeo de Gernika”. Cuentista invitada en Geron-TV. Cuentista invitada al Programa Alas de Mariposa.
 

 

ANGELUS

 

 

Parte I
Como era de costumbre Carlous solía vender droga por aquellos lugares abandonados lo cual le recordaba su carrera frustrada como arquitecto, lo más cerca que había en ese lugar un hospital y un restaurante de comida china.
La vio caer desde el cielo directo al pavimento. Carlous abrió sus ojos una y otra vez, en verdad no creía que estaba ilesa y aún conservaba su cabello bien acomodado. Ella se paró y le sonrió, su túnica color blanca manchada por el polvo de aquella construcción.
—Amigo humano, ayúdame a levantarme—
Calous la tomó de la mano y le ayudó a levantarse.
—¿Quién eres? —
—Gracias, por ayudarme, soy un ángel. Ahora te ayudaré en lo que quieras—
Sonrió de lado, ella era perfecta para su nuevo negocio.


Parte II


Seguía sentada en el suelo, tenía los ojos llenos de lágrimas que trataba de limpiarse con las mangas sucias de su suéter.
Carlous la ayudo a levantarse viendo la sangre que le brotaba entre sus piernas sin más que decir le ayudo a limpiarse, viéndola de reojo la tomó de la cadera con una mano mientras que con la otra tomó el fajo del dinero que había prestado con sus servicios.
Al llegar a casa Carlous sacó un cigarrillo mientras arrojaba su mochila al sillón, revisó su casa varias veces antes de sentirse seguro para terminar tumbarse en una silla.
—Dale, no me mires así, tu querías ayudarme, pero te advierto que debemos hacerte algunos cambios—
Ella miró por la ventana cerrando sus ojos, extrañando el reino de los cielos y el hombre que la guio hasta su salida de aquel lugar blanquecino sin preocupaciones o sin padecimientos.
Carlous se levanta para abrazarla, la llevó a su cama para dormir con ella.


Parte III


Carlous comenzó besarla su cuello, tomó con una mano uno de sus senos para quitarle su túnica.
—¿Por qué los humanos hacen esto? —
Él ignoro completamente su pregunta, decidiendo seguir besando su espalda, bajando suavemente con besos en su cuello después regreso a su boca para bajar su boca a sus senos, tocó con sus manos su espalda.
—¿Qué chingados es esto? —
Miró su espalada llena de cicatrices resientes, en la columna dorsal pudo ver dos grandes heridas.
—El requisito para bajar a la tierra para ayudarnos, era renunciar a mis alas —


Parte IV


Carlous abrió una capilla clandestina anunciando su arrepentimiento el primer domingo de su congregación y el daño que había hecho al ángel.
El ángel por su parte estaba sentado en la primera fila de su iglesia sin decir alguna palabra. Ella era realmente bella y la luz de sus ojos azules resplandecían al saber de qué su gran obra había sido identificada.
Los amigos de Carlous entraron a la iglesia llenos de risa, mucha gente se alarmo pensando que los iban a asaltar.
—Charlie, me sorprende que no hayas cobrado la entrada—
—Esto es diferente muchachos, en verdad estoy edificado por esta maravillosa experiencia—


Parte V


Al terminar el servicio de la iglesia, el ángel se quedó viendo el cielo pensando en un día poder a subir, se perdió en sus pensamientos.
Carlous termino de limpiarle las curaciones a un adulto mayor, vio al hermoso ángel viendo hacia al cielo con esa corona de rosas que la hacían verla tierna. Ella se acercó a él para poner su cabeza en su hombro.
—Sé que ellos vendrán por mí—
—¿Quiénes? —
—Otros ángeles, pero ellos tienen privilegios, ellos podían salir y yo no por eso renuncie al reino de los cielos—
—Descuida, ellos sabrán lo bueno que haces aquí—


Parte VI


En la cena, Carlous se perdió en sus recuerdos desde que abandono la universidad hasta que dio el primer paso en el mundo de las drogas, todo esto lo llevó a conocer a Angelly, era como él llamaba al Ángel, cerró sus ojos para agradecer los alimentos servidos en la mesa, simplemente creía el arrepentimiento y el plan divino. Al inicio de conocerla pensó que tenía un pequeño retraso mental cuál el aprovecharía, pero nunca pensó que ella era realmente una hija de Dios. Fue al cuarto del ángel viéndola dormir, muchas veces cuando despertaba ella le contaba que hablaba con Dios y las cosas que deseaba para su nueva iglesia, mucho dinero se reunió al conocerla esperando agrandar más su iglesia y por el testimonio de Carlous.


Parte VII


Carlous miraba dormir a su amado ángel, por lo regular se metía a la cama para abrazarla y calmar sus sueños del infierno que posiblemente le estaría esperando por su pasado aunque creía que ya era un hombre nuevo, que todo lo que tuvo que vivir era para llegar a la construcción y la verdad de su iglesia. Él amaba a su ángel y nunca haría algo para lastimarla.
Cada vez que iluminado soñaba estar en el infierno, se imaginaba Satanás compartiendo un licor de tamarindo mientras fumaban hierba y ambos se abrazaban, su prototipo del diablo siempre fue una mujer bien formada con algo de androginia vestido de hombre, zapatos lustrados, smoking y moño de color rojo sangre. El mismo Carlous en sus fantasías eróticas con el infierno, con el diablo jalándola de su cabello, ahora realmente se preguntaba sobre el cielo, ángeles dándole de comer uvas en la boca, mientras doncellas vírgenes tocan el arpa, una de esas joven doncellas se acerca a Carlous para besarlo y hacerlos suyo… Oh, oh espera ese no es el cielo, bueno sería el tipo de cielo que imaginaba, pero en lugar de una simple doncella sería Angelly sin marcas en su estado completamente puro.
En la mañana tocaron su puerta unos de los cuidadores del “Hospital Psiquiátrico Cielo” preguntando por su Angelly,se encogió de hombros, les cerró la puerta, prefirió vivir con la mentira creando una nueva religión para justificar todos sus actos inmorales en la tierra, inventándose su nuevo paraíso.