MAYERLÍN ROXANA SÁNCHEZ NARVÁEZ  -COLOMBIA-

PÁGINA 21

 

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Mayerlin Roxana Sánchez Narváez es una joven de 19 años, nacida el 15 de julio de 2002 en el municipio de Arjona- Bolívar ubicado cerca de la capital departamental de Cartagena de Indias, Colombia. Desde niña desarrolló el interés hacia la lectura y la escritura creativa, el primer libro que la atrapó en este mundo de letras fue “El amor en los tiempos del cólera” del novel en literatura y escritor de realismo mágico, Gabriel García Márquez. A pesar de haber leído varios libros con anterioridad, esta inclinación hacia el lenguaje se lo debe a su profesora de bachillerato Ana Pérez Hooker, quien impacto su vida con su gran labor como docente de español.  En un primer momento, pretendía estudiar psicología pero por cosas del destino, actualmente está a punto de cursar quinto semestre en el programa Lingüística y literatura en la Universidad de Cartagena (UDC), cabe destacar que la carrera de psicología aún sigue en sus planes de proyecto futuro, es apasionada por la belleza de las rosas rojas, precisamente, porque su color penetrante le inspira amor hacia las cosas que hace, amor del que ha estado rodeada desde pequeña por mujeres fuertes, luchadoras que la han sostenido y animado a reconstruirse como ser. Le gusta la música por lo cual hace parte de ministerio de alabanza en la iglesia cristiana a la que asiste, en la que canta y recibe taller de Solfeo. Hoy día se atreve a decir que es una pequeña fracción de lo que Dios ha hecho en ella y un borrador de los sueños que aún le falta cumplir, un espejo del ayer y una proyección del mañana.

 

Instagram: @mayrosy08   

Facebook: Mayerlin Sánchez
Correo electrónico: Mayerlinsancheznarvaez@gmail.com

 

 

El sabor de tus besos


He descubierto el sabor de tus besos, me he perdido completa en tu cuerpo despierto.
Palpitante cual fuego que se arrima en mi pecho, que embriaga el alma y me calcina los miedos.
Quédate donde pueda abrigarme tu calor, cual manantial de agua helada que refresca el corazón, te siento y me quemas más allá de la razón.
No he podido negarte que no quiero, no quiero, no quiero de nuevo… perderme de ti.
 

 

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Es tu decisión decir adiós


Entonces has decidido no hablarme, no buscarme... Has tomado la decisión más fácil, dejarme ir.
Hoy he traído a mi memoria muchos de los momentos bonitos que hemos vivido juntos... Y me preguntó si para ti será tan fácil olvidar todo y si amarás otra piel como alguna vez dijiste amar la mía y si ataras a tus sentimientos otro corazón como muchas veces mencionaste haber atado el mío.
Y respeto tu elección, todos tenemos maneras distintas de ser feliz sin embargo, no te niego amor que desee por un instante que lucharas tan solo un poco por quedarte a mi lado...aquí, justo aquí muy cerca de mí.

 

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Lluvia


Llueve a través de los cristales de mi ventana, gotas frías bajan poco a poco
Llueve cual torrente de lágrimas que se escapan por los ojos sin fuerza de voluntad suficiente para ser detenidas
Llueve y el cielo se oscurece como mi vida sin tu presencia
Llueve con tal fiereza como si el cielo mismo intentara clamar a gritos la necesidad de no ver apagada tu belleza.
Aun no cae la noche pero pareciera, hoy lo único que ilumina el firmamento son relámpagos y centellas
El viento sopla en ráfagas como quien pretende arrancar del corazón todas las heridas del pasado
Sopla tan frio que congela el alma de quien se ha animado en medio de la lluvia a escribir estas letras
No sé por qué… pero cuando se está solo, la lluvia más que romántica se hace siniestra.
 

 

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Será de ti


En esta noche calurosa, donde el viento por algún motivo desconocido ha decidido no ventilar, me he propuesto escribirte y no sé cómo empezar... Si empezar describiendo la comisura de tus labios o quizás lo achinado de tus ojos cuando sonríes, la manera tan particular en la que tus mejillas se afirman a la primera expresión de alegría en tu rostro, no he Sabido si escribir sobre tus manos fuertes o el brillo repentino que surge en tu mirada cuando estamos juntos y te susurro " Te Amo”, no sabría si plasmar la calidez de tus abrazos o describir paso a paso la primer vez que nos tomamos de la mano
 - Juro que me sentí muy segura-
no sabría si hablar del primer beso ...de nuestro mágico primer beso, segundo, tercero , no importa... todos y cada uno de ellos lo fueron , de la forma en que sin darme cuenta me atrapaste por completo !Rayos¡
¿Cómo no pude darme cuenta?
 Que me estaba perdiendo en un mar de miradas y que el corazón se alimentaba de esperanzas siempre que estabas cerca, al mínimo gesto de cariño hacia mí
 ¿Cómo no me di cuenta?
Que en poco tiempo mi corazón galopaba sin fin con solo escuchar que mencionarán tu nombre.
Aun no decido sobre que escribir pero sin duda será de ti, de ti, si, de ti....
 

 

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Te esperé


Te esperé incesantemente durante mucho tiempo, anhelando día y noche al menos sentir tu aliento, percibiendo entre el viento las efímeras ráfagas de tu aroma que de algún lugar distante vinieron  , tratando de vislumbrar la forma de tu silueta , atando a mi apasionado corazón la esperanza eterna de conocert, imaginando la textura intensa  de tu piel ardiente, dibujando en el lienzo de mis deseos la horma de tus labio , voluptuosos cual manjar, intrigada por la espera y el hacerme amada , me hice de ti mil y un modelo de expectativas pero te confieso que al tenerte a mi lado y aunque han pasado los años, ninguna expectativa que me haya hecho en la soledad de mis noches, podría rebasar la belleza de tu alma  y todo lo que provocas a esta inocente que se ha dedicado a amarte , cual jardinero a su rosa y se ha hecho presa de un amor que le aviva lo más profundo del ser.
 

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Tormentosa tu partida


Tormentosa, realmente tormentosa es tu mirada, misma que penetra hasta a los seres inmortales, tormentosa como la lluvia que trae consigo la tristeza e indudablemente el frio de la indiferencia.
Quizás las nubes grises expresen con certeza, como antes de llover se anuncia la gran contienda, las aves conocen el goteo y lo opaco del cielo, de un lado a otro parecen andar corriendo sin rumbo en el firmamento, pero saben con entereza a donde quieren llegar.
Tormentosa ha sido tu ausencia que me ha dejado un palpitar, una línea de latidos que se debilitan ¡ya!
Tormentoso es el dolor que cae a chorros por los tejados, clima frio y desgarrador es la huida del ser amado.
Y es que desde tu partida los rosales florecen más porque con mis lágrimas cada día no los dejo de regar.
Tormentoso es el aroma que dejaste antes de ir, al lugar donde se necesita morir para volver a vivir, tormentoso es el silencio donde te escucho gritar.
Si algún día hablas con el viento, dile que no sople más, sus ráfagas se han encargado de arrancar mi soledad.
Si la música es vida, en mí no estará, pues la última melodía, acaba de sonar.
Tormentosos son los domingos en que suelo recordar, tu presencia junto a mí que ya no puedo apreciar.
Si la amargura es nefasta, nefasta también soy yo, porque si existe algún sin sabor en lo poquito de vida, sin duda en mi corazón, la amargura es bienvenida.
En memoria de: Ana Emilia Gamarra García
“Siempre permanecerán tus recuerdos”
 

 

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Tu nombre


Y aunque todavía no cae una sola gota de lluvia, el fuerte viento y las nubes grises se han puesto de acuerdo para prevenirnos
Debo confesar que la lluvia de alguna forma única tiene la capacidad de estremecer el alma más valiente y hasta los sentimientos más inquebrantables
No sé qué otras locuras los enamorados hayan hecho en vísperas de sereno pero por mi parte amor sentí el inmenso deseo de escribir tu nombre en cada esquina de mi pecho
Mis labios lo han pronunciado tantas veces con la intención  de acostumbrarse y que la memoria pueda memorizarlo letra a letra
Lo he escrito en cada esquina de las paredes de mi habitación por si un día la memoria falla y se me olvida tu nombre
En todo caso si nada de ello funciona sabré que en un día lluvioso me dedique a escribir tu nombre con cada latido de mi corazón.


 

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El amor que nunca fue


Bueno, supongo que ya debo empezar…
¿No es así?
La verdad es que no sé cómo hacerlo, pasar de escribir cartas de amor a una despedida, nunca es fácil. Pero lo cierto es que por fin me di cuenta de algo que siempre quisiste y aunque nunca me lo dijiste con palabras audibles, dicen que el accionar de una persona dice mucho más acerca de sus intenciones que miles de palabras vanas que el viento se lleva y tú, tú siempre me lo demostraste, Estaba confundida entre si me amabas o no.
¿Sabes cuánto duele llegar a ese punto de inseguridad?
Pero cada vez fueron más recurrentes los momentos malos, ya no recuerdo cuando fue la última vez que reímos juntos o nuestros cuerpos vibraron al mismo tiempo con un abrazo de esos que antes, mucho antes nos estremecían el alma.
¿Acaso tú lo recuerdas?
Esos pensamientos se me hacen lejanos, extraños… como si imaginara la historia de dos personas distintas, nos desconozco y duele. Lo único que recuerdo son cada una de las lágrimas que he derramado estos últimos meses tras discusiones sin sentido que apagaron poco a poco mi sonrisa ¡! Que tonta fui ¡! siempre me estuviste gritando en silencio que no me querías a tu lado y hoy por fin pude escucharte, por fin.
Cuando se trató de elegir siempre fui la última opción, la que hacías a un lado… quizás solo pensabas “ahh ella me ama y seguirá aquí a pesar del daño que le pueda causar” y si, por un tiempo arrume en una esquina mi amor propio y decidí amarte, me ha dolido ser tan remplazable. Aun esas heridas sangran, cada mentira y acción sin importarte como me afectabas. Siempre me estabas gritando que huyera, que no me querías y no lo escuche, no aprendiste lo que es tener responsabilidad afectiva.
Te entregue mi corazón y te pedí cuidarlo pero hoy está en mis manos más quebrado que nunca, sangra y nada puede detenerlo , seguí aquí con la esperanza de que todo cambiara y pudiera ser muy feliz a tu lado pero cada día ese deseo lo veo esfumarse entre mis manos como agua.
Castigar al otro ignorándolo por días, es maltrato emocional… prometes que no volverá a pasar, que trataremos de arreglar las cosas pero sucede lo mismo… el mismo ciclo toxico y siento merecer estar con alguien que no pueda si quiera ir a dormir enojado conmigo. Te confiaste y olvidaste cuidarme, de regar el amor que siento por ti y hoy temo que por amarte a ti, me olvide de mí…
Sabias donde vivo, donde encontrarme sin embargo no me buscaste, no tuviste el valor de venir por mi o creíste que no lo merecía, hoy escucho claramente tus gritos y te concedo el deseo de ser feliz sin mí, hay cosas que se rompen y no vuelven a ser igual.

 


 

-Mayerlin Sánchez